La Institución Educativa Adventista “Salvador” inició oficialmente sus labores académicas el 1.º de marzo de 1982, amparada por la Resolución Directoral Zonal N.° 0211-83, posteriormente modificada por la Resolución N.° 0918-83. Desde sus orígenes fue reconocida bajo la denominación de Centro Educativo Particular Adventista Salvador, perteneciente a la Asociación Unión Incaica de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, representada en aquel entonces por don Felipe Ruiz Lermo.

En su primera etapa, abrió sus puertas con una matrícula inicial de treinta y seis estudiantes en el nivel inicial y ochenta y cuatro en el nivel primario, bajo la dirección del Lic. Alfonso Ramón Acuña, autorizado por el Ministerio de Educación a través de la Zona de Educación N.° 04 de Barranco. Las pensiones se establecieron en tres mil soles de oro para el nivel inicial y cinco mil soles de oro para primaria. Entre los primeros docentes que cimentaron con vocación esta obra educativa se recuerda con gratitud a doña Isabel Asín Uribe en inicial, así como a doña María de Valer y al profesor Escalante en primaria.

El desarrollo institucional fue pronto evidente. El 1.º de marzo de 1988, mediante la Resolución Directoral N.° 1400-88, se autorizó la ampliación de los servicios al nivel secundario, iniciando con los grados de primero a tercero. Al año siguiente, el 1.º de marzo de 1989, se completó el ciclo con los grados de cuarto y quinto de secundaria, autorizándose en ese periodo el cobro de quinientos cinco intis por alumno. Desde entonces, la Institución Educativa Adventista “Salvador” ha continuado firme en su marcha, consolidándose en los tres niveles de enseñanza y alcanzando logros que combinan la excelencia académica con la formación espiritual.

El fundamento que da sentido a esta misión se encuentra en la filosofía de la educación adventista, cuyo propósito esencial es restaurar en cada educando la imagen de su Creador. Tal como señaló Elena G. de White, la verdadera educación no solo prepara para esta vida, sino también para la eternidad. Inspirada en esta visión, la institución impulsa el desarrollo integral —físico, mental, social y espiritual— de cada estudiante, convencida de que el conocimiento alcanza su más alto propósito cuando se une con los valores, la fe y el servicio a la humanidad.

Hoy, al celebrar 43 años de ininterrumpida labor al servicio de Dios y de la sociedad, la Institución Educativa Adventista “Salvador” reafirma con gratitud su compromiso de formar generaciones de jóvenes con ideales elevados, principios sólidos y visión trascendente, preparados para responder con amor, responsabilidad y entrega a Dios, a la familia, a la comunidad y a la patria.

Con gratitud por el pasado, compromiso con el presente y esperanza en el futuro, la Institución Educativa Adventista “Salvador” proclama con orgullo su lema: “Triunfadores por excelencia”.

Actualmente, bajo la dirección del Lic. Alfredo Cruz Puma, la institución acoge a una población estudiantil de cuatrocientos ochenta y cuatro alumnos, quienes reciben una formación que conjuga la excelencia académica con los principios eternos de la Palabra de Dios, fomentando no solo el desarrollo de competencias intelectuales, sino también la formación de un carácter noble, íntegro y solidario.

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